Son las 3 pm del domingo y ya empiezas a sentir ansiedad. A medida que se acerca la noche, tu estado de ánimo es más sombrío y, mientras tus amigos y/o pareja se divierten, te distancias.

El lunes por la mañana está en tu mente. La reunión de por la mañana está en tu mente seguido de las conversaciones de como fueron tu fin de semana, donde serás juzgado por tus compañeros dependiendo de como fue.

El día pasa y te verás envuelto en otro caso de cómo vencer la ansiedad de los lunes por la mañana, que empezó el día anterior, arruinando tu fin de semana.

Si crees que eres la única persona que experimenta esto, piensa de nuevo. La web MySmallBusiness ha sido inundada de historias de gente que siente lo mismo.

Deja tu trabajo

«Yo era un abogado que trabajaba en el servicio público y temía totalmente todos los lunes por la mañana», dice Alex Kingsmill. «Desarrollé un millón de estrategias para tratar de vencer la ansiedad de los lunes por la mañana, pero ninguno funcionó tan bien como cuando tome un paso firme, dejé mi trabajo, y establecí mi consultoría propia.»

El negocio de Alex, Upstairs, ofrece servicios de orientación para mujeres que quieran lograr éxito en sus vidas. Ella logró cursar un master de psicología en la Universidad de Sydney antes de empezar su nuevo negocio ya hace seis años. El negocio logra unos ingresos de unos $250,000 anualmente.

«Ahora, yo trabajo con otras mujeres que se encuentran en la misma posición, irritadas e inquietas durante las tardes de los domingos porque temen los lunes, y les ayudo a diseñar una salida,» dice ella.

«He enseñado a la gente a manejar los lunes al hacer que el trabajo que no les gusta sea una pequeña parte de una vida más rica. Su trabajo les da la libertad financiera para comprar cosas, viajar, o concentrarse en sus familias. Encuentran un significado fuera del trabajo que hace que los lunes sean más fáciles de manejar.»

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Empieza el día con un objetivo sencillo

David Bobis es el co-propietario y director de marketing de Studio Culture. La compañía de marketing digital que apenas tiene dos años de vida ha ingresado ya unos $500,000. Cuando se siente nervioso el domingo por la tarde, utiliza técnicas simples para calmarse.

«Si empiezo a temer el trabajo, suelo ir a dar un paseo por el vecindario», dice David. «Esto me ayuda a calmar mi inquieta mente y me devuelve la concentración. También invierto tiempo en meditar y en pensar sobre las cosas. Al final, muchas de las cosas que tememos no suelen ser tan malas.»

David dice que si se levanta el lunes deprimido, hace una tarea simple: hacer la cama. «Con lo simple que es esta tarea, el lado de mi cerebro que registra mis objetivos, lo registra como un objetivo cumplido e inmediatamente añade una sensación positiva a mi día», dice. «También suelo levantarme temprano, con lo que siento que ya voy con ventaja sobre el resto de la gente».

David también escribe en su diario, pasando cinco minutos al día escribiendo sobre lo que está agradecido y los planes que tiene que lograr ese día.

«La mejor cura para mí fue dejar mi trabajo, y hacer algo con lo que realmente sentía pasión», dice. «Si tu trabajo no aporta ningún significado a tu vida y te sientes obligado a ir a ese trabajo, ningún tipo de pensamiento positivo que desarrolles puede ayudarte en el largo plazo».

«Una vez que tengas un propósito en tu vida, puedes superar cualquier tipo de ansiedad que experimentes los lunes».

Consultoría y terapia

Trish Radge tiene un enfoque único para los lunes por la mañana: se va a jugar al golf con los amigos.

«Incluso después de jugar mal, me siento bien, porque juego con dos amigas que también son empresarias», dice Trish. «Jugamos, nos reímos y compartimos ideas de negocios. Nuestros juegos de golf son como terapias y consultorías, todo en uno».

Trish es la directora y responsable de manejar a clientes de The Chartist, una asesoría de bolsa que ingresa más de medio millón de dólares al año, dice que reunirse con amigos los lunes por la mañana es una gran manera de empezar la semana.

«Todos nos dirigimos a nuestras oficinas al acabar, pero empezamos la semana de manera positiva y esto siempre me deja con un buen estado de ánimo», dice Trish.

Vivir el presente

Entonces, ¿hay una solución definitiva para superar la ansiedad de los domingos por la tarde y los bajones de los lunes por la mañana?

«Si estás pensando, y temiendo, la vuelta al trabajo un domingo por la tarde, te detienes a ti mismo», dice Elizabeth Cutajar, una psicóloga en Sarina Russo.

«Pregúntate a ti mismo, ‘¿Por qué estoy temiendo el trabajo de mañana?’ y ¿ayudará a mis temores pensar en ello ahora?'»

«Recuerda que el tiempo que gastas el domingo por la tarde en pensar sobre lo que tienes que hacer, o lo poco que deseas volver a trabajar, no eliminará el hecho de que tienes trabajo mañana, pero garantizará una cosa: comenzará a interferir en el poco tiempo de disfrute que te queda del domingo».

Elizabeth dice que la clave es vivir el presente y centrarse en lo que estás haciendo en el momento y disfrutar. Y cuando llega el lunes por la mañana, es importante recordad que es sólo un día.

«Solemos asociar el lunes con una connotación negativa, ya que es el inicio de la semana laboral», dice ella. «Pero el lunes es sólo un día, de tantos en la semana».

«Escribe una lista de tareas para el día y enuméralos para que ayude a priorizar. Tacha cada tarea a medida que la completes. Sin embargo, ten un objetivo para después del trabajo, para que estés motivado a llegar a él al final del día».