Los mercados de todo el mundo han sido sacudidos, y sería fácil para los inversores entrar en el pánico y vender sus acciones.

Gran error, dicen los veteranos.

La historia demuestra experimentar pánico durante episodios de volatilidad es el error más clásico que un inversor puede hacer.

La última vez que este tipo de corrección dio lugar fue en agosto del 2015, recordó Brian Belski de BMO Capital Markets a sus clientes en una nota, recomendándoles que sigan con sus inversiones durante las correcciones del mercado.

«Creemos que aquellos inversores que tratan de averiguar los tiempos de entrada y salida anticipando cualquier corrección de mercados están equivocándose de estrategia,» dijo Brian. «Nosotros siempre hemos recomendado continuar con la disciplina de inversión que cada uno tiene ya que datos históricos sugieren que es muy difícil saber cuando sí y cuando no se debe entrar en el mercado».

Una corrección ocurre cuando el mercado baja un 10% de los máximos. Ahí es dónde estamos ahora. En el caso del IBEX 35, ha bajado desde los 1.000 puntos desde que empezó el año.

Tratar de averiguar los movimientos del mercado termina por meter a los inversores en problemas, y salir del mercado cuando las cosas se ponen difíciles puede llevar a oportunidades pérdidas. Según Brian:

«Creemos que la mayoría de los inversores tienen una tendencia a vender en el tiempo de debilidad y luego esperar demasiado tiempo para volver a invertir, cuando el mercado ya se ha recuperado.»

Además, la venta en pánico puede costarte. Según Savita Subramanian de Bank of America Merrill Lynch, vio como los inversores que vendieron después de una bajada del 2% y volvían al mercado después de 20 días, rendían mucho menos que el resto del mercado en general.

Puede que está vez vengan beneficios si mantienes la calma.