Déjame adivinar. Tienes que estar haciendo algo de productividad en lugar de leer este artículo. Pero debido a una cierta fuerza desconocida de la naturaleza, te decidiste a procrastinar leyendo un artículo sobre cómo parar la procrastinación. Te mereces una palmadita en la espalda.

Afortunadamente, la procrastinación no es una enfermedad. Es sólo una mentalidad que se puede cambiar, y aquí os dejamos con 5 maneras para volver a tu máxima productividad.

1. Prueba con el (10 + 2) * 5

Empecemos con un hack clásico pero muy eficaz llamado (10 + 2) * 5 creado por Merlin Mann, autor de 43Folders.com. No te preocupes. Esta no es una fórmula matemática complicada que debes resolver. El (10 + 2) * 5 significa simplemente 10 minutos de trabajo + 2 minutos de descanso multiplicado por 5, completando 1 hora.

Es crucial atenerse a los límites de tiempo y no saltar el trabajo y romper los horarios. El objetivo de esto es que puedas crear una rutina llena de trabajo de trabajo y descansos. ¿El resultado? Eventualmente te saltarás los descansos.

2. Utiliza el rojo y el azul más a menudo

Limpia tu escritorio y elimina las cosas que podrían distraerte. Según un estudio de Science Daily acerca de qué colores mejoran el rendimiento cerebral, se descubrió que el rojo aumentaba la atención a los detalles mientras que el azul estimulaba la creatividad. Rodeando su lugar de trabajo con estos colores no sólo beneficia a tu cerebro, también es agradable a la vista y aumentará tu productividad.

3. Crea una agenda de descanso

Enumera todas las cosas que desea hacer en su descanso, ya sea navegar en la web, revisar tus correos electrónicos, comer un bocadillo, sacar selfies, Facebook/Twitter, todo. Al igual que el hack (10 + 2) * 5, mete estas actividades entre el tiempo de trabajo, pero con la diferencia de programar estas actividades para que duren sólo 20 minutos. Eventualmente, cogerás tus minutos de descanso sabiamente. Estás acabando con tus objetivos mientras te desvías a hacer las cosas que te gustan también.

4. Establece un horario para las cosas que tienes que hacer

Al igual que cualquier otra costumbre, procrastinar es una cosa difícil de romper. Reemplaza esta costumbre por otra costumbre. Cuando tengas algo que hacer, establece un horario para cada paso y así conseguir mayor productividad. Digamos que tienes una gran tarea de investigación. He aquí un ejemplo de horario:

1. 9:00 – 9:10 am – Configura todas sus herramientas, pestañas del navegador, correos electrónicos, café, etc.
2. 9:10 – 10:00 am – Investigación en Internet
3. 10:00 – 10:45 am – Buscar archivos existentes
4. 10:45 – 11:00 am – ¡Tiempo de descanso!
5. 11:00 – 12:00 pm – Elaboración del informe de investigación

Los plazos son el mejor truco para hacer las cosas. Establecer un tiempo específico para terminar una tarea crea una presión de tiempo incluso si la fecha límite ha pasado.

5. ¡Llévate el trabajo afuera!

Hazte un favor y no arruines el ambiente cómodo de tu hogar. Si necesitas trabajar en un proyecto estresante, hazlo en una biblioteca o cafetería para mayor productividad. Si no, nunca lo terminarás. Tu sofá acogedor y la cama sólo te atraerán a echar una siesta y acabar no haciendo nada.