Los Mileniales siguen asustados por la crisis financiera de 2008, lo que afecta a sus inversiones
La crisis financiera que desencadenó la Gran Recesión, que comenzó en 2007, fue ya una década atrás. Pero trata de decir eso a los mileniales.
Antes de que muchos de los jóvenes de 18 a 34 años comenzaran a invertir, sus actitudes y hábitos de ahorrar dinero ya estaban siendo formados por la crisis.
Una gran mayoría de mileniales, el 82%, dijo que sus decisiones de inversión fueron influenciadas por la crisis financiera y la recesión, según una encuesta reciente de Legg Mason global. Las generaciones más viejas fueron mucho menos afectadas, con el 13% de Baby Boomers y el 14% de los mayores de 65 años diciendo que sus decisiones fueron afectadas por la crisis.
«El dolor que sus padres y abuelos experimentaron dejó una impresión que sólo se manifiesta a medida que comienzan a comprometerse con los mercados», dijo Tom Hoops, vicepresidente ejecutivo y jefe de desarrollo de negocios de Legg Mason, en un comunicado.
Una ventaja de los mileniales, su juventud, es malgastada invirtiendo de manera conservadora. Tom dijo que su tendencia de permanecer fuera de las inversiones arriesgadas podría mantener a los mileniales relativamente seguros si otra crisis golpea, pero disminuye la cantidad total de dinero que pueden ahorrar para la jubilación.
No obstante, no se pierde toda esperanza para los mileniales. El 78% dice que están analizando agregar más riesgo a sus carteras en el año que viene, con el 66% de millennials diciendo que incluiría acciones. En comparación, sólo el 27% de los inversores de la Generación X quieren asumir mucho más riesgo, según la encuesta.
¿Cuales son las costumbres actuales de los mileniales?
Cuando los mileniales eligen acciones, tienden a tener favoritos como Nvidia o Snapchat, incluso si los fondos no están de acuerdo con algunas de sus selecciones.
Aquellos que buscan cambiar sus costumbres de inversión podrían hacerlo porque la mayoría de los mileniales dicen que lamentan sus hábitos de inversión desde la crisis. Su mayor arrepentimiento fue no hablar con un asesor financiero.
La costumbre más difícil de romper no es acerca de dónde poner el dinero, pero si ahorrar o no. Una mayoría de mileniales dijo que «viven para hoy,» y 36% dijeron que no están pensando en mañana.